NADADOR QUE LA FUERZA TE ACOMPAÑE

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¿Qué importancia adquiere el entrenamiento de fuerza en la natación? ¿Por qué entrenar fuerza? Todas las respuestas en este artículo.

Muchas personas creen que para mejorar en natación lo que tienen que hacer es nadar más y más tiempo, pero lo que no saben es que complementar su entrenamiento en la piscina con un entrenamiento de fuerza les va a ayudar a mejorar tiempos, mejorar técnica o, lo más importante, prevenir dolores y lesiones en articulaciones y en músculos, tanto del tren superior como del tren inferior, a la hora de nadar. 

Cada vez más son los clubes de natación que incorporan un entrenamiento de fuerza en sus rutinas semanales, ya que se ha demostrado que el entrenamiento funcional adaptado a la natación consigue efectos positivos en el rendimiento de los nadadores. 

¿Por qué tengo que entrenar fuerza si lo mío es la natación? 

Por supuesto que lo más importante para un nadador es entrenar en el agua, incluso debería estar más horas en la piscina que levantando pesas; pero lo que quiero explicar con este artículo es la importancia y los beneficios de complementar tu entrenamiento en el agua con el levantamiento de pesas, por ejemplo:

  • Aumentarás la fuerza en tus músculos, lo que se transformará en menor cansancio a la hora de hacer la brazada y la patada
  • Mejorarás tus tiempos de nado, ya que produces un aumento de la velocidad de nado
  • Reducirás la fatiga, sobretodo en pruebas largas
  • Te ayudará a nivel mental
  • Mejorarás la funcionalidad de tus fibras musculares
  • Lo más importante, gracias al entrenamiento de fuerza previenes lesiones, no solo a nivel muscular, también óseo

Años atrás se pensaba que el aumento de fuerza en nadadores reducía el rango de movimiento de la brazada o de la patada, ya que este tipo de entrenamiento causaba efectos negativos en la flexibilidad y movilidad del nadador. Esto es totalmente falso, porque diferentes estudios vieron una mejoría mayor en nadadores que entrenaban fuerza con respecto a nadadores que únicamente complementaban sus entrenos en el agua con ejercicios de flexibilidad y movilidad. 

Además se ha investigado sobre diferentes maneras de ganar flexibilidad, y una de las conclusiones fue que al entrenar fuerza aumentaba la flexibilidad; es decir, al hacer una sentadilla estás ganando dorsoflexión en el tobillo o flexibilidad en los isquiotibiales. 

¿Qué ejercicios son los más adecuados para nadadores? 

Pues como todo, depende. Depende del momento de la temporada, de tu objetivo, de las lesiones que hayas tenido anteriormente, de tu fisiología… No es lo mismo el entrenamiento de un nadador que se está preparando un campeonato, que el entrenamiento de una persona que practica natación como forma de ocio. Con esto no estoy diciendo que complementar natación con entrenamiento de fuerza sea únicamente para nadadores profesionales, también es necesario para aquellas personas que ven la natación como su hobby, por los diferentes beneficios que he mencionado anteriormente. 

En mi opinión una buena planificación sería hacer pequeños mesociclos. El primero de entrenamiento de fuerza general, donde incorporamos ejercicios multiarticulares. En un segundo mesociclo podríamos añadir un entrenamiento más específico, en el cual añadimos ejercicios unilaterales o donde trabajemos otro tipo de fuerza como la fuerza explosiva. Y, por último, un mesociclo más especial, donde desarrollamos la fuerza a través de movimientos básicos de natación y diferenciando el estilo que queramos nadar.

Desde mi experiencia, a mí me gusta mucho añadir ejercicios con el propio peso corporal combinado con series en el agua. Este tipo de entrenamiento se le denomina como “entrenamiento concurrente” y consiste en intercalar series de 25/50 metros, con ejercicios de fuerza corporal. Te dejo aquí un ejemplo de cómo sería una tabla de ejercicio tipo:

50 metros de nado + 30” de fondos apoyando rodillas
Desc 1’ 30”
50 metros de nado + 30” de sentadillas con salto
Desc 1’ 30”
50 metros de nado + 30” de zancadas alternas
Desc 1’ 30”
50 metros de nado + 30” de plancha abdominal

Estas planificaciones y ejercicios son solo un ejemplo, como siempre recomiendo que un especialista deportivo adapte tu rutina a tus objetivos, condición física y nivel, ya que si quieres progresar lo mejor es que te centres en la individualización. 

Si quieres extender la información sobre cómo se planifica un entrenamiento de fuerza aplicada a la natación como deporte, por aquí os dejo un enlace.

Como has visto, complementar tus rutinas de natación con un entrenamiento de fuerza (ya sea el mismo día o en días alternos) puede traerte muchos beneficios. 

Me gustaría agradecer a mi compañera Noelia, nadadora y actualmente entrenadora de natación, quien me ha ayudado mucho a la hora de escribir este artículo y de la cual aprendí y sigo aprendiendo. 

Como siempre te invito a escribir alguna duda o algún comentario ya que será un placer contestarla. Un saludo equipo…

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